Restaurante venezolano

Tras pasear por el retiro nada mejor que acercarse a esta cafetería. Fue una gran suerte coincidir. El ambiente fue agradable, todo perfecto y la atención estupenda. Un fuerte abrazo y un gran saludo a la persona que me atendió, Jonathan quien hizo de mi visita un 10 de 10. Seguid así, son un buen equipo y dan un buen servicio

Pedimos unos tequeños para compartir que estaban especialmente buenos y venían con una salsa de miel. Después pedimos un par de arepas y un pabellón para compartir todo. Estaba todo muy bueno de sabor. Repetiremos!!!

Fui con mi pareja a comer (recomiendo reservar primero, el local es pequeño).Pedimos dos hamburguesas. Solo tengo fotos de una de ellasLa inglesa: pan brioche, carne muy buena, bacon, queso y huevo frito, hamburguesa estándar pero muy muy ricaLas dos: Carne de ternera madurada 45 días (dry-aged), salsa Pampa, queso provolone, cebolla a la plancha, pepinillos al estilo Americano y bacon. De esta a reseñar lo rica que estaba la carne y el sabor de los pepinillos, está en mi top 5 mejores hamburguesas.Los camareros no atendieron muy bien.Ojalá hubiese un local en Madrid

Food was amazing, but there’s a lot to be said about the staff and experience. They are turning tables really quickly. Usually they are fully booked so make a reservation a couple of days ahead of time, they have this phone where they take the orders. 30seconds after they took the order the dessert arrived.The menu is very expansive so everyone will have something to eat.

Muy rica, riquísima la comida. Comida latina tradicional espectacular y muy variada. El trato muy bueno, Rosa se portó genial. Lo recomiendo.

Si quieres sentir que comes la típica comida venezolana callejera, este es el lugar indicado! Abundante, sabor brutal y buen precio! Recomiendo el pepito venezolano ya que pueden comer tres personas!!!

Ha sido una experiencia maravillosa, todo riquísimo.Lo recogimos para cenar y nos gustó tanto que repetimos y nos lo hemos para traído para comer en el tren de vuelta a casa. Cantidades muy abundantes.Somos de Alicante y sin duda cuando vayamos a Madrid ¡volveremos!

Aprovechamos una promoción y visitamos este restaurante, de muy buenos recuerdos para los caraqueños.La atención es correcta. El ambiente es agradable.La relación precio valor es bastante deficiente. Lo que comimos no representa lo que pagamos, en tamaño de las porciones ni en sabor, y eso que teníamos el descuento.Hay que cuidar la calidad sobre todo cuando se exige precio.

Delicioso todo, hemos probado varios platos y las cantidades son realmente generosas, mucha variedad en la carta y el sabor impecable, desde las arepas rellenas, pasando por los hervidos y por supuesto coronando con la cachapa con queso guayanés y cochino frito, además los jugos de guayaba, guanábana y parchita están exquisitos. Sin duda repetiremos, excelente la relación calidad-precio.

Cuando leímos las reseñas de una estrella no entendimos nada. Llegamos al restaurante y nos sentaron en nuestra mesa dándonos la bienvenida muy amablemente. En todo momento los camareros estuvieron muy pendientes de nuestras preguntas y necesidades. La comida exquisita, como hacía tiempo que no comíamos en un restaurante. Calidad y cantidad. Pedimos risotto para compartir y nos encantó el detalle que nos lo sirvieran en platos individuales con la media razón correspondiente para cada uno(por cierto espectacular). No podemos poner ningún pero en cuanto al trato, la atención o la comida, todo increíble. La decoración nos resultó acogedora y familiar. El precio por persona puede resultar un poco elevado visto desde fuera, pero merece la pena sin duda. Cierto que cobran el pan y la mantequilla que te ponen sin pedir, pero como en otros tantos sitios.La ubicación estupenda, al lado del museo del prado.Sin duda volveremos a comer aquí la próxima vez que vengamos a Madrid.