Hotel Balneario de Lugo - Termas Romanas

Este hotel es un oasis de tranquilidad y relajación, perfecto para reconectar con uno mismo. Las habitaciones y el edificio son prácticamente nuevos y ofrecen un nivel de confort excelente. El personal es magnífico y educado, siempre dispuesto a ayudar con una sonrisa amable, lo que crea una sensación familiar y acogedora. El entorno del hotel es excepcional, con hermosos paseos cerca del río y un bosquecillo cercano, ideal para disfrutar de la naturaleza. Además, su ubicación es conveniente, muy bien comunicada con Lugo por autobús.Lo que realmente hace especial a este lugar son sus aguas medicinales y el equipo humano que lo conforma. Desde la recepción hasta las termas, todos los empleados, son verdaderos profesionales que se preocupan genuinamente por el bienestar de los huéspedes. Gracias a ellos, se siente como estar en casa y entre amigos. La tranquilidad es tal que el ruido de la carretera no se percibe, asegurando un descanso reparador. Es un lugar excepcional tanto para descansar como para recibir tratamientos de calidad. ¡Gracias por existir y hacer de nuestra estancia una experiencia memorable!

Hotel con una situación inmejorable. La atención de todo el personal de 10. Mejor imposible. Las habitaciones estan muy bien, salvo las pocas que quedan para reformar. Para volver muchas veces.

Hotel tranquilo y relajante. Habitaciones y edificio prácticamente nuevo, de buen nivel. Personal magnífico y educado. Camarero de cafetería cabreado y chica animadora sociocultural muy escasa. Paraje excepcional, buenos paseos y muy bien comunicado con Lugo en autobús a 5 minutos.

Fuimos dos personas al balneario para disfrutar de un baño de burbujas con esencias y un masaje completo. El baño era con una especie de esterilla en el fondo de la bañera por donde salían las burbujas, que se despegaba continuamente, por lo que estuve los 20 minutos peleándome con ello para que estuviera en su sitio". Las esencias fueron literalmente 3 o 4 gotas que la profesional que nos acompañó hasta la bañera echó al agua al empezar. Con todo ese agua

Hemos ido a desayunar seis personas y el camarero (Adrian) muy atento. Pese a la cantidad de trabajo que tenia nos ha atendido de maravilla y siempre con una sonrisa. Así da gusto ir a los sitios. Gracias por el trato, volveremos!

Es un lugar para descansar, recuperar tu ritmo interior, darle un respiro al cuerpo, cuidarte y dejarte cuidar.Todo el equipo (recepción, comedor, cafetería, limpieza y por supuesto termas ❤) está super atento a cualquier gesto de ir a solicitar algo, parece que conocen lo que vas a pedir y con una sonrisa amable te facilitan lo que necesitas.Una sensación familiar como de estar en casa y a la vez entre amigos.Gracias por existir!!Sois geniales!Súper bien ubicado, los paseos cerca del río son una delicia, te adentras en un bosquecillo. Y la ciudad al lado.No molesta para nada el ruido de la carretera, al menos en nuestra habitación.

Muy normalito para un 3 estrellas.El circuito termal escaso, pero muy bien atendido, nos ha gustado mucho.El desayuno un poco pobre y de calidad normal. Para cenar fuera puedes salir por el sendero del río pero por la moche no tiene iluminación.La localización no es la más céntrica pero el entorno del río es bonito.

Un lugar increíble. A las orillas del río, es un sitio en el que solo se respira paz y tranquilidad. Como única pega, pasa pegada la carretera nacional y el ruido de fondo a veces se hace un poco desagradable.

Nos hemos alojado ,realizado circuitos y tratamientos. Partiendo de la base que son aguas medicinales, el verdadero tratamiento,son las personas que allí trabajan. Verdaderas profesionales, que a pesar de la cantidad de gente que tienen que atender, siempre están con gesto amable, preocupándose para que estés lo más cómoda posible. Muchas gracias a vosotras, que sois el verdadero balneario. Rosana, Mari Jose, Carmen, Cinthia, Elisabeth...... sois de lo mejor. Saludos desde Zamora

Muy buen balneario,lo tienen muy bien organizado y el personal muy amable,Carmen me dio un masaje y genialLas habitaciones están muy bien y limpias,nos tocó una mirando al río y al puente romano muy bonito el paisajeEl personal muy agradable,incluso las chicas del desayuno que se las veía desbordadas con tanta gente,creo que volveré