Casa Rufus

Atención exquisita, cercana. El ambiente y la decoración muy agradable.En cuanto a la comida, todo de muy buena calidad. Exquisito.El solomillo de buey es una barbaridad de rico. Se deshacía en la boca. El bacalao una pasada. Las croquetas de boletus, puufff, ni os cuento.Y de postre, esa tarta de limón, estaba de maravilla.

El servicio es muy profesional y amable, sumado al ambiente que es muy agradable. En cuanto a la comida, no quedé del todo satisfecho y en mi opinión tienen platos que son algo caros para la calidad que ofrecen.Pedí croquetas de setas y jamón y sopa de cebolla y ambos estaban ricos. Sin embargo, la alcachofa al horno no me entusiasmó demasiado ya que era algo simplona y falto de sabor/alegría. En cuanto al solomillo de vaca “premium” acompañado de una salsa de foie y miel me pareció que la carne no valía los €28 que cuesta ya que era bastante firme y poco jugosa y no terminaba de absorber bien la salsa, además de la patata asada con puré de patata que a pesar de que estuviera rico me pareció algo básico.Dicho esto, estoy seguro de que hay otros platos de la carta que están muy ricos y te hacen disfrutar de los sabores, ingredientes y productos locales pero en mi caso no estuvo a la altura de mis expectativas, especialmente por el precio del solomillo. Si que fue muy agradable el trato y el servicio y recomendaría el sitio a pesar de todo.

36 años veraneando en el Valle de Arán y desconocía este sitio. Fuimos a cenar porque nos habían hablado muy bien y desde luego superó todas nuestras expectativas. El ambiente es muy acogedor, el servicio cercano y exquisito, lo que hace que te sientas como en casa y la relación calidad-precio inmejorable. La comida de 10, tanto en cantidad y como en calidad. También descubrí la crema aranesa, un postre típico que seguramente sólo lo encontrarás aquí, buenísimo y recomendable 100%. En definitiva, Casa Rufus todo un descubrimiento al que sin duda volveremos el próximo verano.

Es un sitio con encanto en el valle. Merece la pena la visita aunque cueste reservar.La calidad de la comida es excepcional y es bueno dejarse aconsejarNosotros pedimos croquetas 9/10Salteado de boletus 10/10Espárragos verdes 7/10Cochinillo deshuesado y confitado 10/10Solomillo con Foie y miel (su plato Estrella) 10/10Entrecote 10/10Merece l pena saludar al dueño y hablar con el. El sabe mucho, lleva 37 años dando de comer, cenar y beber a mucha gente.Cuando vas en temporada baja se aprovecha mucho mejor.Volveremos… siempre que podamos (guiño guiño)

Sitio increíble, la comida está buenísima y el trato es espectacular, súper amable. La carta es sencilla pero a la vez variada, y todo lo que hemos probado ha estado genial, muy recomendable y si estáis por la zona y queréis venir, reservad con antelación, porque es complicado de un día para otro.

Uno de los mejores restaurantes de la zona para disfrutar de la tradicional gastronomía aranesa. Personal muy amable y profesional.

Si hubiera 10 estrellas también las daria..en todos los aspectos. La comida es brutal. Pero el servicio es insuperable, creo que es la mejor camarera que me he encontrado nunca! Con los niños ha sido un amor y ha estado atenta en todo momento. Para repetir 1000 veces , sin duda alguna.

Si te encuentras por la zona y quieres disfrutar de la gastronomía aranesa, puntualmente de una espectacular y tradicional olla aranesa pides incluir una parada en este magnífico lugar, es elegante y familiar. El servicio y atención son correctos por no decir justos. Ahora en cuanto a la comida es realmente notable.!, la olla aranesa que a primera vista parece un bomba proteínica es simplemente deliciosa, la ración se puede pedir para uno, dos o las personas que quieras, el conejo a la brasa de sabor muy bueno pero para mi gusto se quedo seco. Las manitas son otro muy buen plato que es para disfrutar. En cuanto al poste el coulant no falla, es correcto para compartir.En resumen un buen lugar para probar, comer muy bien y recomendar.

De los mejores restaurantes del Vall d’Arán.Muy muy recomendable.