Sala Roma

Estuvimos cenando en el restaurante Falling Leaves, resultó una experiencia muy positiva, los platos que pedimos nos encantaron, buena calidad y todo ello en un ambiente bonito, muy bien decorado, con música en vivo y lo mejor, la atención de todo el personal. Absolutamente excepcional, gente profesional, simpática, me sentí muy bien en todo momento. Volveremos seguro.

Las estrellas van referidas a la climatización.Últimamente tienen el aire a una temperatura extremadamente baja y al avisar a los empleados la respuesta es que ellos no pueden hacer nada pues se controla desde una centralita.Respecto al resto, una sala de juego cómoda y en general, con buen servicio.

Se come muy bienMuy buen servicio, muy amables los camarerosBuen ambiente

He venido varías veces al comedor que se encuentra arriba. La comida está muy bien de precio y sobretodo de sabor. Todos los trabajadores son muy amables y están pendientes de si necesitas algo. El ambiente es muy tranquilo y espacioso. Creo recordar que el menú del día entre semana es de 7,50€ y entra primero, Segundo y postre.

Todo estupendo siempre que vamos. La verdad, el personal es muy amable pero tengo que destacar a Pilar y Jesús. Pilar es un amor de persona, siempre te recibe con mucho cariño, una sonrisa y palabras bonitas. Jesús siempre te saca una sonrisa, unas cuantas risas y momentos divertidos. Ambos tienen una energía maravillosa que de cara al público se agradece muchísimo.

Noviembre 2023En el piso de arriba del Bingo hay una sala con mesas de comedor, el sitio está bien y tiene una chimenea falsa de unos 5 metros, muy agradable de ver y justo encima una pantalla espectacular de unos 5 metros por 2 y de gran calidad en la que ponen unos paisajes de otoño muy bonitos.Pasando a la comida, hay un menú ejecutivo por 16 euros que está bien, también hay carta. tome pasta carbonara y albóndigas que estaba rico.Nos pusieron de entrante una croqueta de cocido que estaba bien.El personal amable.Tiene limitaciones, ya que aunque está tras unas mamparas, es una sala de juego y por tanto te piden el DNI para entrar y no puedes llevar a menores de 18 años.

Éramos un grupo de jóvenes que íbamos por el cumpleaños de una amiga. La chica de la recepción muy simpática y nos atendió muy bien. Sin embargo la chica que vende los cartones nos trató súper mal y fue súper borde. Era la primera vez que íbamos y no sabíamos cómo funcionaba, ni las normas, pero bastaba con decírnoslas no hacía falta tratarnos así.

Cena con espectáculo. Elegimos una excelente actuación de jazz. Nos encantó. La cena muy bien relación calidad precio, servicio muy amable. Sólo nos llamó la atención la entrada que es la misma de la sala de juegos y especialmente la habitación de fumadores en el pasillo de entrada con la puerta abierta y dejando un olor a tabaco en todo su entorno por donde tienes que entrar y salir. El día 1ue encuentren otra ubicación para la misma con mejor ventilación y apartada del resto... GENIAL

El trato y el bingo guay. La comida un auténtico desastre.Primero, todo lleva muchísimo pan con muchísimo aceite, bastante innecesario. La “cecina” era básicamente grasa que no se podía morder. La milhoja de melón tenía jamón que no sabía a nada y todas las láminas eran súper gordas. La crema de guisantes estaba buena pero tanto pan sobraba. La Tosta de queso de cabra súper aceitosa y fría. El rabo de toro con muchísima grasa y la salsa no me pegaba. El lingote madurado estaba bueno pero calidad normalita. En ambas carnes las patatas paja muy aceitosas. De postres tenían muy poca variedad a pesar de que íbamos con un menú de más variedad y bastante normales.