Horno Pastelería Ana

Horno cafeteria. El café que sirven muy bueno, los cruasanes tambien Y las napolitanas de jamón York y queso espectaculares.

Horno, pastelería, cafetería.Desayuno ahí a menudo, las empanadillas de atún y pisto, las empanadillas de queso crema y jamón york (una delicia).El pan de agua, el mejor.Tienen pan quemado todos los días, que por cierto, deliciosos.La atención al cliente, excelente.Se pueden hacer encargos.Abren a las 6:00 am y cierran a las 2:00 pm.Este Horno es un tesoro dentro del Barrio de la Luz.

La profesionalidad es una verguenza y la falta de respeto se denota cuándo hace caso omiso a las advertencias y peticiones de los vecinos. Deja que beban, griten y estén de juerga hasta las tantas de la noche. Los vecinos tenemos que aguantar hasta que deciden marcharse, mientras, tenemos que cerrarnos en nuestras casas y aguantarlos sin poder convivir en silencio, sobre todo cuándo decides irte a dormir. Una vergüenza por parte de las dueñas y empleadas del establecimiento.

Voy casi todos los días a desayunar. Muy bueno todo y la dependienta muy agradable y profesional. Todo lo que he probado, muy bueno y bien de precio. Recomendable 100/%

Llevo comprando el roscón de reyes 2 años seguidos,creo q es el más bueno q he comprado nunca y mejor de precio, no llega a 20€ relleno de Nata y unas 8 raciones.El pan y la bollería muy rica también,la única pega q ya no abren por la tarde y me gustaba ir a merendar,hacen unos croissants de 10

Me encanta su pan de agua, sus cruasanes..Todo! Las chicas que atienden son muy majas.

Muy buena atenciónPan y bollería de muy buena calidad, riquísimo

Empezó como un horno puro y duro y se ha sumado a la tendencia cafetería que muchos han seguido.Dentro se pueden ver fotos antiguas de lo que era antes el horno, por lo que debe estar varios años en marcha sin cerrar, la verdad es que siempre está lleno de gente habiendo hasta tres persona despachando.Es un lugar ideal para un buen desayuno con zumo de naranja exprimido ( en temporada ) y tostadas de pan hechas in-situ con ingredientes caseros.El personal de allí es un verdadero encanto, como en todo comercio local, el trato es muy personal y se agradece, además en plenas fallas van peinados para las fiestas.Yo no me puedo resistir a su deliciosa torta de pisto o coca en llanda, las adoro. Hay muchos tipos de dulces, pasteles y panes. Venden también pan de molde integral y normal por encargo.También puedes coger unos cafés para llevar y poder llevarte un buen desayuno a casa.

Los croissants no estaban muy allá, pero el café y el café con leche estaba bien. La atención por parte de los trabajadores muy buena.

Me encanta que haya establecimientos de barrio como este de toda la vida. Calidad, tradición, compromiso, innovación y sobre todo resistencia a la desleal competencia que las grandes cadenas quieren imponer a los obradores artesanos como este donde, un equipo muy motivado, se bate el cobre para dar un servicio de lo mejor a la clientela más exigente.