La Garriga de Castelladral

Es la excelencia!! Un lugar para desconectar y recargar emergía, un lugar que te transporta a otras épocas, relajante y que te invita a imaginar… rodeado de naturaleza. El personal desde la llegada excelentes en todo. El personal del comedor muy amable y profesional. Especial mención a Mar de recepción, una chica amable, cariñosa y muy profesional. Cuando la excelencia existe faltan palabras para describirlo. Volveremos para volver a disfrutar de esos momentos inolvidables!! Gracias por todo!!

Masía muy confortable, limpia y bien organizada en la que se respira un ambiente sereno, gracias a su propietaria. Lugar perfecto para relajarse, no hay cobertura de teléfono.Quizás alguna pequeña laguna en el restaurante, pero de poca importancia. Gracias..!

Es mi lugar preferido para llegar cuando vengo a España. Sus servicios y habitaciones son increíbles, cómodas. llenas de detalles y me hacen sentir como en casa. El trato es personalizado y se preocupan por darte la atención que necesitas. El lugar es una maravilla para descansar, desconectar , trabajar rodeado de naturaleza. Si eres alguien que busca trabajar y tener placer , este lugar es la mezcla perfecta las actividades que tienen como las caminatas en el bosque o los eventos de yoga son el complemento perfecto . Conozco a la familia dueña de la masía y son encantadores !! Te aseguro que disfrutarás tu estancia aquí .

Una masía reformada con muchísimo gusto , un rincón para respirar y conectar con la naturaleza. Los detalles de la decoración, la amabilidad de los dueños y el personal, la comida , las actividades hacen un tándem perfecto. Hay magia en vuestra casa , gracias por compartirla con nosotros!

Estuvimos alojados una noche en la suite y quedamos encantados con el espacio, la limpieza y los pequeños detalles. Disponen de varios espacios en los que relajarte dentro de la masía.Todo el personal fue muy amable y atento con nosotros.Pudimos disfrutar de una cena muy buena y un desayuno con productos de la zona y de muy buena calidad, incluyendo bizcochos, mermeladas y miel caseras.También disponen de una piscina en la que relajarse.Absolutamente recomendable.

Ideal para ir en pareja. Spa privado. Zona de relax y vistas espectaculares.

Emplazamiento con mucho encanto y el servicio muy atento. El evento fue maravilloso y el equipo del hotel respondió muy bien. Volveremos.

un buen lugar para desconectar del día a día. Dimos unos largos y reparadores paseos por el bosque. En cuanto al sitio, es encantador, está rehabilitada con mucho gusto. Las habitaciones, son una auténtica pasada, nosotros estábamos en la suite. Además tiene fácil acceso, en coche, y además tiene un amplio parking. si en algo les recomendaría que mejorarán, es en el apartado de la gastronomía, y el comedor. Ya que la comida se hace un tanto repetitiva, y además le daría una vuelta más a la elaboración. Ya que si quieres comer o cenar fuera, tienes 30 minutos de ida y después tus 30 minutos de vuelta. Y lo suyo es pasar el máximo tiempo en la masía, ya que es lo que se busca, desconexión. Pero aparte de el tema de la comida, que creo que se podría mejorar, personalmente, es un auténtico placer. Sin duda volveremos.

Hemos ido de boda de unos familiares todo fantástico, pero creo que como sugerencia deberían hacer el camino al altar asfaltado y la alfombra roja encima, es incómodo andar por la alfombra cuando hay piedras debajo, por otro lado también como sugerencia las sillas del aperitivo son incómodas al ser de metal se clavan en el cuerpo deberían pensar en poner unos cojines para estar más cómodos los invitados y por último decir que si los novios piden una última canción para cerrar el baile se les debe de conceder, fue desagradable que el chico que estaba encargado de la música le negara a la novia su última canción, me parece ilógico con la cantidad de dinero que los novios habrán pagado por una boda fantástica que no le ha faltado de nada.Lo digo como mejora. Para futuras bodas.

La Garriga de Castelladral es una sitio absolutamente único, es casa lejos de casa. Es un lugar donde el tiempo se para y consigues conectar con tu esencia. Naturaleza, comida excepcional, personal amable y cercano, opción de talleres, masajes o baños de bosque…Nosotros hemos ido en familia y también solos, y la experiencia nunca decepciona. Siempre vuelves más conectado y regenerado.