Tanatorio Municipal de Las Rozas

No ponemos mas estrellas porque no se puede, todo amabilidad, profesionalidad y cariño en un momento tan complicado que no hay suficientes palabras de agradecimiento, espacialmente por parte de Rubén Amaro, Ángel Yepes y Sofía Medina y de Cristina (la señorita de la cafetería). Gracias.

A pesar de pagar el hotel más caro de tu vida, más de 1000 euros la noche, solo la sala velatorio, se permiten el lujo de no incluir catering por la pandemia, sin descontarlo de la factura, y lo sustituyen por una docena de botellines de agua, de los cuales 5 estaban ya abiertos y a medio consumir. Permiten hasta 25 personas dentro del velatorio, sin controlarlo, pero en el bar no permiten que 5 personas se sienten juntas para comer. Lo más que la empresa interfunerarias se ha dignado a hacer, es pedir disculpas. No vuelvo a contratarles ni muerto.

Voy a contar mi experiencia. Porque entiendo que cada uno, en momentos así tiene una experiencia diferente en función de muchas variables.Las instalaciones son correctas, quizá les falta remodelarlas, la cafetería no está mal, sin ser comparable a las de otros tanatorios de Madrid, aunque tampoco es cosa de hacer comparativas en estas circunstancias. Al otro lado de la calle hay más cafeterías, incluso una gasolinera.La ubicación y la comunicación son buenas, con buses de Madrid y periferia casi en la puerta, con un pinar a su espalda.Si acaso hay algo molesto es la ubicación cercana de un polideportivo enorme, que no hace gracia ver como otros siguen sus vidas como si nada, aunque no sea su culpa.Hay parking de sobra, además de una explanada a la derecha en la que se suele aparcar, el sempiterno servicio de flores, incineración y un personal amable aunque algo esquivo.En mi caso solo puedo decir que tuve un trato bueno en todo momento, hubo una comunicación fluida y no faltó de nada.También es verdad que nosotros venimos pagando los muertos"

Tanatorio con salas no muy grandes, pero acogedoras. El personal muy atento, algo que se agradece en los momentos difíciles que se pasan cuando tienes que visitar un lugar de este tipo. Muy bien comunicado y pegado al cementerio.

Estupendo servicio, tranquilo y muy amables, es Justo lo que uno necesita para estos momentos difíciles , gracias

Creo que un tanatorio que está abierto toda la noche, no es normal que habrán tarde y cierren pronto,sin tan siquiera tener una vez abierto ,ni una triste bolleria o poder hacer un bocadillo!!!!!Por desgracias venimos de fuera y nos hubiese gustado poder tomar alguna cosa ,tanto para cenar como para desayunar!!!!Gracias!!!!!

Sobre el tanatorio el día del funeral no tengo nada que decir. Sé que la vida es muy dura pero que la gente por una simpleza te ponga pegas en un trámite de por si doloroso por 'un quítame allá esas pajas' es simplemente reprochable. Es añadir dolor gratuito. No he tenido el ánimo ni de discutir. Me lo he tragado y punto.

Las salas son pequeñas. El lugar nones muy acogedor. Da aspecto de desangelado. La cafetería está cerrada. Apenas hay personal. El entorno está bien , pero en general el aspecto es descuidado. Podría estar mucho mejor. Son unas buenas instalaciones mal cuidadas.

El personal es muy amable y las instalaciones son nuevas, amplias y acogedoras.

Este tanatorio en las Rozas es una instalación de 2.000 m2 ofrece, además de las salas velatorio, amplios espacios comunes para comodidad de los familiares. Los servicios son los siguientes. 5 salas velatorio, asistencia 24 h. Oficinas de contratación. Cafetería restaurante, capilla a disposición de los familiares. Parking, servicio de floristería. Además ponen un servicio de cortesía de café e infusiones en la sala.