Reserva Natural de los Sotos del Ebro en Alfaro

El lugar perfecto para dar un paseo por la naturaleza.

Estos lugares hay que cuidarlos precioso accesible gran paseo disfrutarás sólo o acompañado merece la pena

El lugar perfecto para escapar de los ruidos de la ciudad y tomar aire fresco.

Precioso para ver las aves y un buen paseo.

Un paseo muy chulo, y más si vas con una visita guiada que te explican cómo fluye el río por el Soto, la fauna y la flora que te rodea. Imprescindible llevar prismáticos para observar a todas las aves que te rodean.

Fuimos con los niños a ver la reserva natural pero nos llevamos una desilusión parecía que estaban de obras .

Las vistas de los Sotos del Ebro son preciosas. Hay una pasarela con un sendero circular muy cómodo y con acceso fácil que te lleva por la ribera del Ebro en La Rioja baja, dejándote ver los pequeños islotes, meandros y el espectacular ecosistema de plantas como alisos, fresnos,álamos, sauces,etc...así como una gran variedad de aves como cigüeñas, mirlos, martines pescadores... El zorro, la nutria y el jabalí también discurren por esta zona...Hay una siembra enorme de perales, aprovechando el curso del río por sus fértiles tierras.

Visita obligatoria para amantes de la naturaleza y fotógrafos. Perfecto para visitar en familia. Bien señalizado, con apartamentos, muy tranquilo, con zonas de picnic y un montón de rincones para descubrir.

Hacer todo este recorrido, bien paseando, en bici o corriendo es un extraordinario goce para los sentidos

Para ir al mirador del soto de la Nava, con sus paneles explicativos, hay que tomar la senda que aparece a la izquierda cuando se sale del parking (situado al lado de una bodega con una gran chimenea). Este mirador se asoma a una madre del río, antiguo cauce. Parece un humedal. Para ver al Ebro más vivo hay que seguir la pista hacia delante teniendo al río a nuestra izquierda. Llegaremos a un sendero con el cartel de zona inundable y ahí es donde se ve el río fluir. A la derecha queda un paraje sin vegetación por las obras del proyecto Ebro Resilience de la Confederación Hidrográfica del Ebro. La idea es dar más espacio al río para que se desborde ahí en las subidas de cauce.