Casa Rural La Ermita

Gran casa con 5 habitaciones, cada una de ellas con su baño, muy recomendada para grupos grandes pues dispone de comedor, cocina y estar adaptados para todos. Los niños disfrutarán mucho con la sala de juegos, el futbolín o la gran cama elástica que se encuentra en el exterior.

Pues hombre .... Estuvimos en el puente de mayo y no me importa q se me identifique pero vamos la casa pelín sucia, y publicidad engañosa: no piscina, aparatos oxidados en la parte trasera del jardín bbq bastante dejada, parrillas no usables (extremadamente sucias y muyyyuy usadas) no hay armarios...en fin... Q las fotos muy bien sacadas.

Casa Preciosa decorada con mucho gusto y arraigada en la tierra que le rodea. Amplias estancias comunes, rocódromo, cama elástica, jardín con mesas exteriores, barbacoa y un dueño siempre servicial y buen conocedor de los alrededores. Un placer que repetiremos con seguridad. Gracias Frqn

La casa es muy amplia, bien equipada y fresca para el verano. Zona tranquila y sin ruidos. Muy original el rocódromo, el futbolín y la cama elástica para los niños (y no tan niños, jeje). La piscina pequeñita y agua muy fría, pero para refrescarse estaba bien. El gimnasio se paga aparte, 20 € para toda la estancia. El dueño, Fran, es muy amable, te ayuda en lo que necesitas y te explica sitios para visitar, para comprar, etc.

Hemos pasado un fin de semana, varias familias, en total 19 personas. La casa es muy original y tiene muchos detalles interesantes.En la decoración se ven detalles curiosos y reciclados Mires donde mires. Resulta muy particular.Tiene cosas que a los niños les gustan mucho: el rocodromo interior, el futbolín, las camas elásticas… pero también tiene algún detalle que me ha parecido importante no tan positivo1) en las habitaciones caben 19 personas sin ningún problema. Pero el resto de la casa no está preparada para tantas personas. En la mesa no caben más de 12/13 personas para comer a la vez, por lo que es obligatorio comer en turnos.2) las habitaciones son amplias, y todas tienen su baño incorporado, lo cual resulta positivo. pero los baños son como cajas de cerillas.3) la casa tiene una zona de juegos exterior perfecta para niños. En ella está la piscina, dos cañas elásticas, el giroscopio y un columpio.Pero para llegar a esta zona hay que pasar una verja con muy poca o nada seguridad. Y el giroscopio nos ha parecido bastante peligroso para niños. Estos dos motivos hacen que los niños no puedas estar solos en esta “zona infantil”, lo que obliga a tener a un adulto siempre “de vigía”4) en la planta baja está el comedor y la cocina, y en la primera planta están las habitaciones.Entre el comedor y la planta de arriba no hay ninguna puerta ni pared de separación. De manera que si en el grupo hay alguien que se acuesta más tarde, o que se levanta más pronto que los demás, es probable que despierte a los demás con el ruido.Por último indicar que el propietario Fran es una persona atenta y agradable. La vajilla, cubertería y cristalería está completa y en buen estado, lo cual se agradece bastante. La zona de la parrilla es muy original, y perfecta para un pequeño piscolabis, aunque es necesario que lleves tu propia parrilla si quieres hacer barbacoa.Si te ha parecido útil mi comentario déjame un voto positivo Gracias!

Un sitio precioso. La casa genial, muy calentita, la chimenea y la cocina de leña hacen que toda la casa esté caldeada. Todas las habitaciones con baño, y muy cómodas. El dueño, Fran, muy amable, muy buen trato. Deseando repetir.

Encantados con la casa, sin duda una de las más curiosas en la que nos hemos alojado.Fran, el propietario, mantiene todo limpio y en orden y lo mejor de todo es que lo tiene montado de manera sostenible y recicla y restaura todo lo que todavía sirve y lo aporta a la casa, lo cual le da un toque muy pintoresco a la casa.La casa es súper fresca en verano, y muy bien equipada en cuanto a electrodomésticos y utensilios de cocina, menaje, etc.La piscina le aporta un extra interesante, aunque no es de obra ni muy grande, pero para que los niños se diviertan y darse un baño relajante va de sobra.Junto a la piscina tiene una cabaña equipada con aparatos de gimnasio que ya le gustaría a muchos gimnasios, aunque nosotros no lo pudimos usar porque creo que hay que pagar un extra y no lo íbamos a usar.Los niños han disfrutado mucho con la sala de juegos con rocódromo y las camas elásticas y con mucha tranquilidad, la casa es la última del pueblo, hemos estado durante las fiestas del pueblo y no se percibía casi el sonido de las orquestas durante la verbena, asi que bien tranquilos hemos estado.

Hemos pasado un fin de semana con amigos y ha sido estupendo. La casa está muy cuidada y curiosa con un sinfín de detalles en los que se nota el cariño con el que están realizados y dispuestos en cada lugar. Los cristales con sus hojas y flores secas, los detalles de las paredes, las lámparas, todo nos encantó.... Las habitaciones tienen camas muy cómodas, baño en cada una de ella lleno de detalles...Hicimos barbacoa que con la leña que dejó Fran a nuestra disposición, prendió rápidamente y como el tiempo acompañaba, nos destapó la piscina para que nos diéramos unos chapuzones y pese a que el agua está a fresquita, somos del norte, así que nos bañamos a gusto.Fran, el propietario, contribuyó a hacer nuestra estancia agradable, brindándose a solucionar nuestras pequeñas preguntas. Un placer el finde y la casa totalmente recomendable tanto para adultos solos como con niños, que estarán encantados de probar los columpios y las camas elásticas.

Perfecta para ir con niños, buenas instalaciones y habitaciones muy amplias. Lo unico a destacar, llevar agua en botella pq la del grifo sale con algo de color, es potable y yo bebi normal y no ha pasado nada pero por saberlo. El dueño majo y puntual, y hay cosas cerca para visitar, muy recomendable la necrópolis y las huellas de dinosaurios... el pueblo de esos apartados que permiten desconectar y que un fin de semana de dos dias parezca un descanso de 5 o 6.