Cabañas Rurales El Hayal de Aloños

Tengo tan buen recuerdo de este lugar por lo único y precioso, por lo amable que fue el señor que nos atendió y porque es dogfriendly que se lo recomiendo a todo el mundo. Estoy deseando volver. Magnífico para familias.

La estancia fue increíble, una maravilla dormir con el sonido del río, las cabañas tienen un encanto especial y están bien equipadas.Nuestro perro se lo paso igual de bien o mejor que nosotros, se nota que al dueño le gustan los animales, además fue muy amable durante la estancia.Lo recomiendo de querer una experiencia tranquila y sobre todo si quieres llevar a tu mascota.

Lo que parecía un cuento por el bello paisaje término como una película de terror. La cabaña se encuentra en malas condiciones, muebles con rotos y falta limpieza. Las almohadas con manchas y los colchones de mala calidad. Antes de hacer la reserva yo pregunté explícitamente por la calefacción y me aseguró que tenía (algo se veía en las fotos, pero las cabañas para nada estan como las fotos) y cuando llegamos a 5ºC con la cabaña sin calentar, nos ha ofrecido calefactores electricos, de esos de baños, para calentar toda las estancias. Hemos pasado tanto fría la primera noche que nos hemos ido los tres malos, tomando corticoides por una infección respiratoria... el otro día nos ha traído radiadores de aceite, y por eso nos hemos quedado, para ver si mi niño de 2 años iba a mejor ya que el viaje tan largo le cuesta y desgasta... Pero realmente las ganas eran de irnos. Tiene la casa de niños que huele a pis de gatos, tiene un colchón lleno de suciedad en la litera y una ventana rota!!. Lo que más nos chocó es que cuando hemos dicho al dueño nos dijo que eran los huéspedes que usaban y no limpiaban!!! Como si no tuviera que hacer el! He tenido el niño todo el viaje con miedo a la cabaña por ello.La barbacoa era simplemente inutilizable con la cantidad de suciedad. La chimenea igual, estaba sucia, llena de cenizas.El alargador que nos ha dejado venía con un empalme casero qué seguramente no es para nada legal en un alojamiento rural... Los radiadores de aceite hemos tenido encima de sillas y muebles, lo que les hacía muy poco seguros ya que no llegaban a lod enchufes.Falta lugar para colgar toallas en el baño, utensilios básicos de cocina (lo poco que tenía hemos tenido que lavar porque estaban llenos de grasa y polvo, al menos un trapo de cocina, o que avises para traer... Las sabanas y toallas bien, pero las mantas por el olor se notaban que no estaban limpias y tenían manchas. Los edredones ni te digo, lleno de pelos, imposible usar.Ha sido uma experiência bastante desagradable.La finca es muy bonita, pero igual está abandonada, con árboles caídos y mucha basura.

Una pena que esté tan sucia la cabaña y sin luz ni agua caliente. Juan (anfitrión),un sinvergüenza que me llama mala leche" por exigirle sábanas limpias en las camas

Maravilloso lugar en el paraíso, al lado de nuestra vivienda en Colindres cerca de Santander, y en los valles pasiegos.Lugar para desconectar, disfrutar del campo en estado puro, naturaleza por todos lados, un río, para poder disfrutar y ver el agua correr.Juan el anfitrión maravilloso, enseguida te sitúa, te dice dónde comprar, donde ir y todo lo que necesites.Sin más al que le guste la naturaleza, el camping, la barbacoa, y disfrutar del verde, este es un sitio a visitar, si o si.

Una pena que este tipo de reseñas no se puedan verificar su fiabilidad, dado la importancia para los negocios. Se debería pedir algún tipo de comprobante.Ya he perdido la cuenta de las veces que he venido al Hayal, o como definimos cariñosamente todos los que repetimos... las cabañas de Juan". Es como venir a casa. La recepción es inmejorable. Siempre atento a todo lo que se necesite. El lugar ...no se puede definir. Es vida.Gracias a todos los clientes que hacen posible que "nuestras cabañas" sigan estando lo mejor posible año tras año

Después de un viaje de más de 5 horas, resulta que NO se habían guardado mi reserva y no me pudieron avisar de que tenían problemas con la luz.Iba con un niño pequeño y me quedé sin alojamiento para mis vacaciones. La alternativa que me dieron era quedarme sin luz y sin agua 5 noches.Sin conocer la zona, me tuve que buscar yo misma, porque el dueño ni tuvo intención de ayudarme a buscar algo, otros sitios donde dormir de última hora, que no tenían nada que ver con lo que buscaba en estas cabañas y por supuesto con afectación a la calidad y el precio de las estancias.Me resultó bastante desagradable el trato recibido.

Es un sitio de absoluto ensueño. Te sientes como en un cuento de hadas, no queríamos irnos. Fuimos mi novio y yo con nuestra perrita y ella no podía está más contenta! Con más perretes por ahí con los que jugar, en medio de la naturaleza, con el río la lado de las cabañas...una maravilla. Las cabañas son una preciosidad, estuvimos en la del hobbit y es como estar en la película! El dueño nos puso muchísimas facilidades y estuvo pendientes de nosotros durante toda la estancia. Volveremos seguro!!

Una vergüenza, cabañas sucias sin luz ni agua caliente. El mantenimiento nulo, no creo que cumplan normativas de seguridad encima por pedir que lo limpiaran el dueño nos dijo que teníamos mala leche. Teníamos reserva de 3 días y tuvimos que salir corriendo de allí y buscar otro alojamiento. Tiene dos perros sueltos por la finca que se acercan a las cabañas es una estafa

Desde el primer momento que llegamos nos pareció todo muy raro , desde el dueño del lugar , hasta lo que él llamaba “oficina” , sin tener en cuenta que todo esto estaba en un valle alejado de todo, en el que no tienes nada de cobertura y si quieres tener cobertura tienes que subir al pueblo que está un poco lejos y todo en cuesta .todo con poca limpieza y todo muy extraño , le dimos 50€ por no discutir con el dueño y no llegamos a entrar ni en la cabaña .No se lo recomiendo a nadie , doy una estrella por el paisaje .