Finca Son Ametler

Nuestra estancia ha sido magnifica. El hotel es súper bonito, cuidado y muy tranquilo.La cena y el desayuno fantásticos y el personal muy profesional y agradable.Nos encantó el autoservicio de las bebidas.

Sitio idílico en el corazón de la isla. Si buscas tranquilidad y alejarte del jaleo de la playa, muy recomendable. Las cenas también a destacar su variedad en cada noche, nada de buffet. Siempre platos diferentes y espectaculares. Para los niños también ofrecen menús variados en cada cena

Nuestra estancia ha sido maravillosa en este hotel. Precioso por dentro y por fuera, unas vistas maravillosas, una piscina increíble, todo muy cuidado al detalle. El desayuno espectacular con mucha variedad y de calidad. Y el personal muy atento y amable siempre. Un lugar para desconectar y estar en paz. Cati nos ha hecho muchas recomendaciones para visitar la isla. Sin duda nuestra estancia ha sido impecable gracias a este gran alojamiento. Esperamos poder volver repetir pronto!

¡Maravilloso! El entorno, las intalaciones, el desayuno y la atención del personal maravilloso

Agroturismo de alto nivel, habitación de buen tamaño, con gran baño con bañera y ducha, y buena terraza con vistas. El personal muy agradable y atento.Permiten mascotas, lo malo es que no te dejan comer con tu perro… para ello tienes que estar en la terraza, normalmente siempre en los hoteles que dejan mascotas podemos comer con ellos dentro. La cena y desayuno muy buenos (los precios son elevados)

Un lugar paradisíaco en Mallorca donde desconectar. El sitio es precioso, parece que estás en la Toscana. Son muy amables, las habitaciones muy amplias con bañera hidromasaje. El desayuno exquisito. Gracias, volveremos sin duda.

Nos enamoramos de este Hotel en un entorno bucólico e irrepetible, con vistas a la montaña y rodeado de naturaleza. Hotel con mucho encanto y el personal muy agradable, sobre todo James que es maravilloso y atento y te hace sentir como en casa. Un lugar idílico en el que uno querría permanecer meses en paz, belleza y tranquilidad. Y el restaurante sencillamente grandioso. Cocina de calidad y preparación con mimo y gusto. Muy bueno. Fantástico.

Excelente atención personalizada directamente através Cati,responsable en atención al cliente de la finca.La que nos brindó con eficiencia y eficacia todo nuestro bienestar,antes, durante y después de nuestra estancia.Agradeciendole enormemente su amabilidad,sintiéndonos muy agusto, como en casa.El lugar es ideal,tanto por la infraestructura( dentro y su ubicación,rodeada de naturaleza).Y a su vez la atención del personal,restaurante,limpieza,jardinería,entre otros muy profesionales.Por lo que todo hizo que sin lugar a dudas repitamos nuevamente, y recomendemos a todo el mundo.Un saludo y abrazo fuerte,de parte de Rafa & Rita.

Un alojamiento excelente ubicado en el inicio de la Sierra de Tramintana que despliega estilo en su decoración, su ubicación y su trato con el huésped.Su sencillez y tranquilidad te atrapan desde el primer momento, gracias también a sus fabulosas vistas campestres desde el salón de desayunos, las terrazas de las habitaciones o desde la fabulosa piscina.Las habitaciones son espaciosas así como sus baños que se complementan con lencería, toallas y sábanas de excelente calidad.El trato es cercano y tranquilo, y con un nivel de servicio excepcional. Todo el equipo es fabuloso: mantenedlo.El desayuno es cuidado, variado y personal al nivel de hoteles de mayor categoría y precio.Especial valoración a las cenas, con una ambientación cuidada y un menú siempre cambiante, con producto de calidad y de cercanía.La ubicación es muy buena en si misma y también para moverte por el norte de la isla: montañas cercanas y costa y playa a 20 min.Volveremos pronto.